Este post va dirigido a todos aquellos estúpidos tarados que en sus pobres mentes creen hacer compatible la ideología de la izquierda con el tribalismo antropofágico más cenutrio y becerril; a todos aquellos imbéciles que sumergidos hasta las trancas en el simplista juego de nosotros (los de aquí, los buenos, los mejores) y ellos (los de allí, los malos, los peores) son capaces de identificarse a sí mismos como revolucionarios de izquierda. Me dais asco, y quizá lo más correcto fuera sentir lástima por el cementerio neuronal que lleváis sobre los hombros, pero no, vosotros dais asco. Ojalá fuera solo eso pero encima mancillais a todos cuantos han luchado, sufrido y muerto por extender ideales que consideraban internacionales, comunes. Creéis usurpar su lucha, pero no, eso es lo que os decís a vosotros mísmos para mantener lejana la dolorosa certeza de lo que sois, pero vuestra lucha es otra, la lucha de la marioneta que se deja manipular por pertenecer a un colectivo que le proporciona una identidad que es incapaz de proporcionarse a sí mismo, pero que a cambio le exige dejar de ser humano. La lucha de un nazi. Ihr Kampf.
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