martes, 28 de octubre de 2008

Otra "guerra de negros"



Otra guerra más esta del Congo que ocupara la atención mediática unos pocos días, rellenando huecos en los telediarios hasta que se desvele el misterio del heredero de Bush.


Otra guerra más, de esas que nos venden como "guerras de negros que no saben jugar a otra cosa que no sea a matarse", y que es presentada de forma sutil como tribal y salvaje, sin profundizar demasiado en sus causas. Lo cierto es que a los medios no les interesa decir que las compañias de teléfonos móviles que pagan tantos anuncios estupendos con gente fashion que dice cosas cool como Hello Moto! tengan algo que ver.

Así que fabrican esa papilla informativa digerible que mantiene la congruencia de que esas cosas pasan allí porque son como son, o sea peores que nosotros, sugiriendo a través de un racismo solapado que lo que pasa en el Congo son cosas de negros que no saben parar de darse machetazos, que no hay más.

Pero hay mucho más. En el Congo se están matando por el control del coltan, un mineral de propiedades imprescindibles para el desarrollo de la tecnología, desde misiles hasta vídeo consolas pero sobre todo condensadores de moviles y del que el Congo, en concreto su zona Este, posee alrededor del 80% de las reservas mundiales. En definitiva, el Congo tiene la desgracia de que a Alcatel, Compaq, Dell, Ericsson, HP, IBM, Lucent, Motorola, Nokia, Siemens, AMD, AVX, Epcos, Hitachi, Intel, Kemet, Nec, Sony, Bayer, Motorota e IBM, entre otros les salga más barato comprar coltán a bajo precio en un pais destrozado por una guerra civil en el que cualquiera de los dos bandos te vendería lo que fuera al precio que fuese para conseguir comprar más armas antes que el otro. Sobre todo si la mano de obra que utilizan para su obtención son niños esclavos, todo son beneficios , es un negocio redondo.

En el fondo la vieja historia del progreso en Occidente contada en África: niños convertidos en soldados o esclavos, mutilaciones, desplazados, asesinatos y violaciones. Una guerra de negros más, que esta vez veremos en alta definición.

No hay comentarios: